Me mareo. Me aburro. ¿Cuándo llegamos?. Estas son frases que estarás acostumbrado a escuchar en los viajes con los peques de la casa. Frases que nos acaban sacando de nuestras casillas, poniendo en riesgo la seguridad de los ocupantes del vehículo. Tal vez estés preparando tu viaje de vacaciones en coches, así que estos consejos te ayudarán a hacerlo más seguro, con menos preocupaciones y que lo hagan entretenidos.
La seguridad, lo primero
¿Sabías qué el 75% de las muertes infantiles en accidentes de tráfico se podrían haber evitado? Este dato, indicado por la Dirección General de Tráfico (DGT), señala la gran importancia de que los niños viajen de la manera más segura posible. Un hecho que es responsabilidad de los adultos que les acompañan en un coche u otro medio de transporte.
Este porcentaje de error aumenta cuando se determina el número de heridos graves que se pudo haber evitado: un 90%. Según la DGT, todos esos heridos graves, cuya cifra real asciende a los 80.000 anuales en Europa, pudieron evitarse con sistemas de retención infantil o medidas como llevar bien abrochado el cinturón e ir sentado de la manera correcta. Esto también se aplica en el caso de los muertos, cuyo dato deja unos 1.000 niños fallecidos por accidente en Europa al año.
Los datos preocupan y pretenden concienciar a padres y adultos de la importancia que tiene el hecho de implementar todas las medidas de seguridad posibles cuando se viaja en el coche con niños. La prevención es básica para no lamentar sucesos trágicos.
¿Cómo deben viajar los niños en el coche?
Viajando con niños hay que tener presente un gran principio básico y obligatorio en la circulación: los más pequeños deben llevar un sistema de retención infantil homologado. Es muy importante este último término, puesto que no llevar una sillita infantil adecuada puede causar un gran peligro para los niños, además de poder ser motivo de sanción.
Cabe recordar que los niños deben viajar en una sillita infantil en el coche hasta que su estatura sea más alta de 1,35 metros, lo que suele equivaler a los 12 años más o menos. Pese a esto, desde la DGT se recomienda usar sistema de retención infantil hasta que el menor alcance la estatura de 1,50. Todo lo que sea prevenir en el coche podrá ser un plus positivo en caso de accidente.
Otras medidas de seguridad
- No debe llevar mucha ropa de abrigo que evite su correcta sujeción. Tampoco es aconsejable que lleve algún elemento en las manos, para evitar que el objeto pueda distraer al conductor durante la marcha.
- Usa un retrovisor para bebés. Su instalación no es obligatoria por ley, pero sí que facilita mejor el control de los más pequeños, sobre todo cuando no haya un adulto que les acompañe aparte del conductor.
- Lo ideal es que los niños siempre vayan acompañados de un adulto que supervise en todo momento su estado.
- Hay que evitar también malas prácticas que pueden ser muy perjudiciales de cara a un accidente, como es el caso de que dos sillitas compartan el mismo cinturón o no cambiar el sistema de retención infantil tras un pequeño accidente por colisión, por ejemplo. En este último caso, la sillita se ha podido ver afectada.
- Nunca se puede llevar al niño o bebé en brazos. En el caso de un accidente, por muy bien que esté sujeto, será el que más daños sufra.
- Es importante también que los adultos den ejemplo y usen el cinturón de seguridad siempre. Esta es una práctica obligatoria, bajo peligro de sanción económica si no se cumple, y será ejemplarizante para ellos.
- Hay que tener en cuenta la presencia de airbag en el asiento en el que se coloque la sillita, sobre todo si está colocada en sentido contrario de la marcha y si no hay forma de desconectar dicho airbag.
¿Cómo sentar a los niños?
Un simple error en la colocación del sistema de retención infantil puede ser peligroso en caso de colisión o accidente de tráfico. Es necesario dedicar unos minutos a comprobar que el niño está bien sentado y que la sillita está bien sujeta. También se debe de prestar una especial atención al tipo de sistema de retención infantil según la estatura y peso del niño que vaya a utilizarlo.
La edad también es un referente, pero el mejor indicador es la talla. Así, se pueden encontrar los siguientes cinco tipos según su peso o edad:
- Grupo 0: niños de 0 a 9 kg con una estatura de 40-85 cm. Son los llamados capazos y se ponen en el asiento del copiloto en sentido contrario de la marcha. El bebé iría tumbado en su interior sin sujeción.
- Grupo 0+: es también para bebés de hasta 18 meses, con un peso que no sea superior a los 13 kg y una altura de entre 45 y 105 cm. Se trata de los conocidos como maxicosi o portabebé, que ya tienen una sujeción para el pequeño, y se pueden llevar tanto en la parte delantera como trasera del coche en sentido contrario de la marcha.
- Grupo I: son las sillitas destinadas a niños de entre 1 y 4 años que se pueden colocar tanto en el sentido como al contrario de la marcha, pero siempre en la parte posterior del coche. El peso indicado es de 9-18 kg y la altura sería de entre 75-105.
- Grupo II: niños de entre 3 y 6 años, que tengan un peso entre 15 y 25 kg y una altura de 105-125 cm. Es un sistema de retención infantil que tiene una silla elevadora.
- Grupo III: en el último grupo se encuentran los menores de 7 a 12 años, con un peso de 22-36 kg y una altura de hasta 135 cm. Se trata de una especie de cojín elevador.
¿Cómo evitamos los mareos?
Uno de los grandes retos cuando se viaja con niños en el coche es evitar que se mareen. Para ello, hay varios trucos que pueden ayudar a que esta situación se produzca:
- Evitar que el niño juegue con una videoconsola, lea o tenga la cabeza inclinada hacia abajo.
- No realizar el viaje justo después de comer.
- Llevar una buena ventilación y temperatura en el vehículo.
- Intentar llevar una velocidad baja cuando haya muchas curvas, como en carreteras o puertos de montaña.
Si el niño se marea frecuentemente, se puede solicitar al médico un tratamiento para estas circunstancias.
Juegos para entretener a los niños
Viajar con niños puede llegar a ser tarea difícil ante el hecho de tener que hacer que no se aburran durante el trayecto, sobre todo si es un viaje largo. A continuación, te dejamos algunas ideas para jugar con los más pequeños durante los viajes.
- Juegos con palabras, sílabas o letras: frases encadenadas, trabalenguas, palabras o letras prohibidas, buscar letras del abecedario durante el viaje…
- Adivinanzas: el famoso veo-veo, el quién soy, Tabú, juego de preguntas…
- Juegos de historias: contar cuentos del revés, crear una historia entre todos con frases asociadas…
- Canciones: cantar las típicas canciones de viajes o de campamentos, aprender alguna canción popular, furor (seguir la canción cuando la música se pare), adivinar canciones…